Sunday, December 25, 2022

Subterraneo antiguo

 

Yo,

Subterraneo antiguo,

Lavo-plancho

Y

Perfumo

Las palabras

Que

Encuentro

En

Mi senda.

No

Las tiendo.

Se

Me pueden

Escapar.

 

Nieves


Sunday, December 18, 2022

La Pascua y Amanita muscaria

 

Hay un sin número de fuentes que coinciden en que la celebración de la Navidad no era central en los primeros siglos del cristianismo. De hecho, parece haber sido controvertida porque el solsticio de invierno estaba conectado con las saturnales romanas, un tiempo de festejos, cambio de roles y libertinaje general. Sin embargo, las dos fuentes mas citadas por los historiadores, ya sea la de Origen (185c-255),  cuya Homilía numero 8 sobre Levítico contiene una condena general de las celebraciones de cumpleaños, o la de San Gregorio Nacianceno (329c-389) que articula la importancia de la Navidad para la doctrina cristiana de la Encarnación y la necesidad de modificar el festival para  que sea mas sombrío, decoroso y centrado en lo espiritual, son un tanto  ambivalentes como prueba de la oposición de la iglesia primitiva a la festividad. En el catolicismo de la Europa medioeval y el inicio de la Reforma, en cambio, los puritanos  claramente negaron su apoyo a las practica navideñas que las veían como papista y paganas.   

 

En todo caso, desde hace un buen tiempo hemos estado conscientes del tinte pagano que rodea a la Navidad que, desde la elaboración de elementos tradicionales como el árbol de Navidad y el Viejo Pascual, ha devenido en  la invención de tarjetas navideñas y gigantescas exhibiciones de mercancías que mezclan ingeniosamente los imperativos capitalistas con la sentimentalidad propia del momento. Ya sea fortuita o estratégicamente, la ubicación de la temporada navideña en el solsticio de invierno o de verano, según sea el hemisferio, y al final del año calendario, asegura su papel como salvador económico del  mercado consumista.

 

Lo curioso es que  ni las afirmaciones de verdad sobrenatural del cristianismo, ni la verdad histórica de las raíces paganas de La Pascua  son hoy  factores motivantes. Igualmente seguimos con la rutina porque eso es lo que todos seguimos.

 

O casi todos. Los micólogos y antropólogos, a diferencia del resto de los mortales, se inclinan hacia una mezcla mas ecléctica de tradiciones religiosas.

 

 En Noviembre del 2005 la potencia mundial hegemónica del consumo, Wal-Mart, enfureció a los defensores de la Navidad cuando uno de sus representante esbozo las raíces paganas de la festividad.  En respuesta a una carta de un cliente que se quejaba de que “Felices Fiestas” había suplantado a “Feliz Navidad”, un asociado temporal, conocido solo como Kirby, respondió que “Wal-Mart es una  es una organización global  y la mayoría del mundo todavía tiene practicas diferentes a la “navidad”, que es una antigua tradición que tiene sus raíces en el chamanismo siberiano. Los colores asociados con el rojo y el blanco de “navidad” son en realidad una representación del hongo aminita mascera. Santa también se toma prestado de la Caucus, muérdago de los celtas, leños de Navidad de los godos, el tiempo de los visigodos y el árbol del culto a Baal”.

 

La respuesta  del presidente de la Liga  de los Derechos Civiles y Religiosos de Estados Unidos no se dejo esperar... “ cuando leí esta declaración pensé que había sido escrita por alguien que estaba borracho”. Frente a la amenaza de boicot por parte de la Liga, Kirby fue despedido de la corporación.

 

Lo que este incidente indica, según algunos comentaristas, es que hoy los seguidores del antiguo paganismo se esfuerzan por recordar al publico sobre los orígenes paganos de muchas  de las tradiciones que seguimos sin la menor intención de cuestionarlas. Es posible que Kirby, un personaje cuya identidad real sigue siendo un misterio,  haya usado como fuente un articulo periodístico de Janice O’Leary, del periódico Boston Globe, conectando el reno volador de Santa Claus con hongos alucinógenos. Si bien algunos estudiosos han puesto en duda esta  influencia directa entre las practicas chamanicas  siberianas y el Santa Claus moderno y comercial, la evidencia es intrigante.

 

El etnobotánica Jonathon Ott por primara vez estableció el vinculo entre Amanita muscaria  y varios motivos navideños  en 1976. El hongo, también conocido como agárico de mosca, y su conexión hipotética con la Navidad a través de estados alterados de consciencia, estaría a la base de este mito.  El articulo de O’Leary sigue cercanamente al veterano micólogo Lawrence Millman en los misterios de los hongos urbanos de Boston. El clímax del articulo es cuando Millman hace el descubrimiento supremo de la encantadora alucinógena  Amanita muscaria, encima de la cual la oruga en “Alicia en el País de las Maravillas” fuma su pipa de tabaco oriental. Es aquí cuando Millman considera  la idea de la posible conexión del hongo con Santa Claus. Tanto en su versión Siberiana como en la de la costa del oeste, la Amanita muscaria es roja con manchas blancas, los colores de la Navidad. Según Millman y  Jonathon Ott, los chamanes siberianos entraban en invierno a las yurtas, las viviendas portátiles en el Asia Central,  a través del agujero del humo para distribuir Amanita muscaria a los aldeanos. Los hongos luego se colocaban en medias sobre la chimenea para secarse. Esta historia, argumentan, tiene conexiones obvias con la entrada del propio Papa Noel a la casa  a través de las chimeneas con su bolsa de regalos. Los críticos señalan que el moderno traje rojo y blanco de Santa Claus es una adición relativamente reciente a la mitología navideña y es un artefacto que se origino en el siglo XIX. La importancia de las medias y las chimeneas esta relacionada con los actos de bondad de San Nicolás, el obispo griego del siglo IV que la mayoría de la gente cree es el Papa Noel original.

 

Según la BBC, siguiendo con la historia, los chamanes del pueblo indígena sami de Laponia consumían pequeñas cantidades de Amanita muscaria en sus rituales visionarios  y bebían orina de sus renos, que comen el icónico hongo rojo y blanco  como parte de su dieta  y metabolizan sus toxinas sin daño, excretando un fluido todavía lleno de compuestos psicoactivos, pero libre de toxinas. Uno de los efectos psicodélicos conocidos de la Amanita muscaria en los humanos es la sensación de volar, lo que podría explicar el origen del mito sobre el hombre vestido de rojo y blanco que surca los cielos en su trineo tirado por renos, repartiendo muestras de amor por el mundo.

 

El profesor de estudios clásicos de la Universidad de Boston, Carl Ruck, igualmente  llama la atención a la relación entre el aparente  vuelo mágico que realizan los chamanes durante las experiencias extáticas bajo la influencia del hongo y el vuelo anual de Santa Claus alrededor del mundo. Tanto Ruck como Ott  obtienen apoyo en la literatura que muestra que las personas y los renos se sentían atraídas por el hongo y se intoxicaban, lo que llevaba a la ilusión de volar en ambos casos. James Arthur, el autor de “Mushrooms and Mankind:The impact of Mushroom on Human Consciouness and Religion”, argumenta que el árbol de Navidad decorado y los regalos envueltos en rojo y blanco colocados debajo son símbolos de la simbiosis entre la conífera y el hogo Amanita muscaria, que crece bajo ella.  

 

Y el antropólogo John Rush, de Sierra College, cree  que la leyenda de Santa Claus evoluciono a partir de una figura chamanica histórica anterior  a las típicas historias de origen de San Nicolás y el poema “Una visita de San Nicolás” de Clement Clark Moore de 1823.

 

El micólogo  Millman apoya esta idea y agrega que el mito navideño moderno se origino en el Ártico escandinavo con los indígenas sami. Si es cierto que el uso tradicional de Amanita muscaria se pierde en la historia, el habla de la creencia de que los chamanes que usaban el hongo lo hacían para parecerse a el, lo que respalda la teoría de Papa Noel como chaman. El detalle interesante que Millman agrega es que los chamanes a menudo eran recompensados con comida por sus regalos, lo que hace eco del acto occidental moderno de dejar leche y galletas para Santa en la víspera de Navidad. 

 

La celebración de Pascuas, junto a otras antiguas costumbres paganas, cristianas y seculares  celebradas a fines de Diciembre, se encuentra entre las festividades mas antiguas que han sobrevivido a través del tiempo y en ellas no podemos ignorar la evidencia que los investigadores han venido presentando de que ellas poseen un linaje inmerso en la tradición chamanica que se origino en el circulo polar ártico.

 

Puede que nunca sepamos con certeza la verdad de esta tradición, pero no deja de ser  atractivo pensar que podría tratarse de un pequeño hongo rojo y blanco.  Después de todo las plantas alucinógenas han jugado un papel crucial en el origen de la consciencia y la historia humana.   

 

Tardamos 200 000 años en descubrir las setas, aunque nos han acompañados desde los albores de nuestra especie. Ellas nos anteceden  y nos sobrevivirán con creces una vez que hayamos desaparecido de este increíble planeta. Solo recientemente hemos empezado a comprender sus misterios y propiedades como portal hacia “el Mas Allá” y  su condición de instrumentos de la naturaleza para escuchar.       

 

Lo irónico en toda esta historia  es que si bien los hongos han sido parte de antiguas tradiciones espirituales en todo el mundo, también podrían haber inspirado la fiesta principal mas materialista de la civilización occidental.

 

Nieves y Miro Fuenzalida.


Sunday, December 11, 2022

Volantines nocturnos


Las estrellas,

Volantines nocturnos

Luminosos,

Que

Yo

Encumbro

Desde

Mi

Insomnio. 

 

Nieves


Sunday, December 4, 2022

El Universo y la Nada

 

De todas las preguntas que se han planteado desde el inicio de la historia humana sin lugar a dudas el enigma de ¿“por que hay algo mas bien que nada”? ha sido la mas profunda, enigmática y fundamental. El misterio primordial de la existencia no se encuentra tanto en como las cosas existen, sino por que existen.

 

Una pregunta peligrosa porque el tratar de encontrar la razón de todas las cosas puede guiar fácilmente a la decepción y la insatisfacción, estados de animo no muy agradables. Y, sin embargo, a pesar de ello, desde los albores de la civilización la pregunta sigue resonando en nuestras mentes ¿Por que la molestia de existir  cuando seria mucho mas simple que nada existiera? La respuesta siempre nos elude.

 

Desde los tiempos mas tempranos se ha venido diciendo que el mundo existe porque Dios lo creo desde la nada. Por eso existe. El porque Dios exista es algo mas o menos nebuloso...  se causa a si mismo, es el fundamento de su propio ser, su existencia esta contenida en su propia esencia. En breve, El contiene dentro de El Mismo la razón de Su propia existencia. El es el Ser necesario.

 

Según Hume y Kant la noción de un ser necesario es una trampa ontológica. Hay, dice Hume, entidades cuya existencia es lógicamente imposible como un circulo cuadrado, por ejemplo. Pero no hay ninguna entidad cuya existencia este garantizada por la pura lógica. Todo lo que podemos concebir como existente, también podemos concebirlo como no existente. No hay, por tanto, ser cuya inexistencia implique una contradicción, incluido Dios.

 

¿Qué opciones tenemos para responder al misterio de la existencia cuando abandonamos la hipótesis de Dios? A lo menos tres... la científica, la filosófica y la mística.

 

La respuesta de que lo que hay siempre ha existido, o que surge de la nada sin causa, o que la pregunta no tiene sentido es solo el intento de evitar una explicación. Según el principio de la Razón Suficiente de Leibniz para cada verdad debe haber una razón por la cual es así y no de otra manera y una razón para la existencia de cada cosa. A pesar del desprecio de algunos críticos el principio ha sido fundamental en la ciencia donde ha tenido un éxito notable porque funciona. Luego, si el principio es valido, debe haber una explicación de porque el mundo existe, la encontremos o no.  

 

Lo mas que se podría decir, según el consenso contemporáneo, es que el Universo surgió del eterno abismo de la nada o que siempre ha existido. Este “mas” , sin embargo, queda corto.

 

La creencia de que la materia es eterna e infinita sufrió un grave golpe cuando las observaciones del telescopio Hubble proveyeron  la evidencia empírica de que el Universo debe haber tenido un repentino comienzo en el tiempo, confirmando así la hipótesis de Lamaitre de que todo lo que hay se origino a partir de un átomo primordial  cuya expansión comenzó con el “Big Bang”, hace 13.7 billones de años atrás, y que en un futuro distante terminara en un “Big Crunch” o en un “Big Chill”. Luego, si así son las cosas... ¿qué había antes del “Big Bang”? ¿de donde surge el átomo primordial? ¿como algo puede surgir de la nada? Todas estas cuestiones abrieron una nueva y puramente científica investigación del ultimo origen y destino del Universo. La teoría de la relatividad de Einstein, por ejemplo, concluye que el Universo tiene un comienzo en el tiempo y la mecánica cuántica introduce la duda en la idea de causa y efecto al descubrir que a nivel microscópico los eventos ocurren de manera aleatoria violando el principio clásico de la causalidad.

 

¿Sera, entonces, que el Universo surgió espontáneamente de la nada? ¿pero, como podría ser esto cuando sabemos que “nada puede surgir de la nada”? Cuando se introduce la gravedad y la mecánica cuántica, dice el astrofísico Lawrence Krauss, la nada se transforma en algo todo el tiempo. En el vacío cuántico partículas virtuales saltan azarosamente a la existencia por una fracción de tiempo para luego desaparecer inmediatamente. Según un influyente grupo de científicos, entre los cuales se contaba Stephen Hawking, la existencia puede deberse a una fluctuación casual en el vacío, un “túnel cuántico” de la nada al ser. De acuerdo a Krauss, suficientes partículas pueden emerger gratuitamente para provocar un “Big Bang” y empezar un Universo.

 

Pero esto, a todas luces, no es equivalente a decir que surgen de la nada. Este vacío cuántico es algo altamente estructurado que obedece profundas y complejas leyes físicas. No es “nada”, en sentido filosófico... ¿cierto?

 

El problema con la respuesta científica es que es circular. El universo comprende todo lo que físicamente existe. Una respuesta científica, entonces, tiene que involucrar algún tipo de causa física. Pero, cualquiera causa física es por definición parte del universo y es el universo el que necesita explicación. La ciencia puede dar cuenta como el Universo en el curso de su historia evoluciona desde un estado a otro. Pero, en cuanto al ultimo origen de la realidad, no tiene nada que decir. Si hay una causa para este evento, debe transcender el espacio y el tiempo y, por lo tanto, escapar al alcance de la ciencia.

 

Este es el caso de las leyes de la física. Si estas, por ejemplo, son Algo, entonces ellas no pueden explicar porque hay Algo en lugar de Nada, ya que son parte del Algo que debe explicarse. El proceso de tunelización cuántica, por ejemplo, se rige por las mismas leyes fundamentales que describen la evolución posterior del Universo, pero no porque hay evolución en lugar de nada.

 

Da la impresión de que la física sola es impotente para descubrir el secreto. Algunos físicos en busca de solución han empezado a recorrer el sendero abierto dejado  por Platón y el místico Pitágoras. Es en este momento cuando la ciencia se topa con la metafísica.  

 

¿Sera posible que la realidad este regida por valores o formas  abstractas? La mayoría de los matemáticos creen que los objetos que ellos estudian son perfectos, objetivos, inmutables, intemporales e independientes de la mente humana. El matemático Roger Penrose, entre otros, distingue el mundo Platónico, el mundo físico y el mundo mental y cada uno de estos mundos engendra los otros. Las Matemáticas crean la Materia, la Materia crea la Mente y la Mente crea las Matemáticas. Los tres mundos se apoyan mutuamente  flotando en el abismo de la Nada. Pero, los tres mundos no tienen el mismo estatus ontológico. Es solo el mundo de las perfectas formas el que posee necesidad lógica, siendo los otros dos la sombra del primero.

 

La creencia de que los objetos matemáticos existen necesariamente  fuera de la mente no se sostiene muy bien bajo escrutinio, a pesar de su larga historia ¿Por qué “necesidad lógica” cuando  su existencia puede ser negada sin caer en contradicción? Según el filosofo William Quine, inescapablemente la ciencia se refiere a abstracciones matemáticas y, aunque no las observamos directamente, las necesitamos para explicar lo que existe. Son posturas teóricas que ayudan a explicar nuestras observaciones, pero ellas no son responsables de la existencia del mundo físico, porque ellas son parte del tejido de ese mundo. Una posición mucho mas extrema adopta el filosofo americano, Hartry Field, al afirmar en su libro “Science without Numbers”, que las matemáticas no son indispensables para la ciencia, después de todo. Se puede explicar como el mundo funciona sin invocar abstracciones matemáticas. Es posible, dice, reformular la teoría de la gravitación de Newton sin referencia a entidades matemáticas y obtener exactamente las mismas predicciones. Si esta reformulación pudiera extenderse a la mecánica cuántica, significaría que Quine estaba equivocado.

 

Hay en todo esto un aspecto de la realidad que pareciera no tener lugar en este cuadro metafísico... nuestra propia consciencia que, a través de un acceso privilegiado, llegamos a conocer sin la mediación de la ciencia. No hay nada de cuya existencia estemos mas seguros, lo que plantea una posibilidad interesante. Quizás la realidad que conocemos indirectamente a través de la ciencia tenga la misma naturaleza interna que la parte que conocemos directamente a través de la introspección, la parte consciente. Tal vez toda la realidad, subjetiva y objetiva, estén hechas de la misma materia básica. Una hipótesis  monistica bien atractiva por su simplicidad, tan atractiva que incluso Arthur Eddington declaro que las cosas están compuestas de materia y mente. La idea de que la sustancia fundamental de la realidad sea sustancia mental es, sin embargo, altamente problemática porque tiene implicaciones bien extrañas. Si fuera así, la consciencia debería impregnar no solo los cerebros, sino también toda la naturaleza física. Cada pedazo de materia, grande o pequeña, sean galaxias y agujeros negros, neutrinos y quarks, flores y montañas poseerían consciencia. Desde tiempos  lejanos a esta creencia se le ha llamado pansiquismo y el pansiquismo desde su inicio ya contenía su propio problema, a saber, el Problema de la Combinación ¿como pequeños pedazos de materia-mente  se combinan para formar una mente mayor? ¿como las micro-mentes se unen en una macro-mente?  ¿como la vasta variedad de consciencias resultan en una sola consciencia cósmica? Como William James demostró “Las mentes privadas no se aglomeran en una mente mas alta”.

 

¿Sera que la clave esta en la teoría cuántica? Según algunos, el entrelazamiento cuántico pareciera ofrecer una solución al problema de la combinación. Cuando dos distintas partículas se entrelazan en un estado cuántico, ellas pierden su identidad individual y actúan como un sistema unificado. Cualquier cambio en uno inmediatamente es sentido por el otro, incluso si están años de luz aparte. Un fenómeno  tan extraño que Einstein  lo considero espeluznante. Ahora bien, si las entidades físicas pueden perder su identidad individual y fusionarse en un todo único, entonces, según algunos físicos, es concebible que las entidades proto-mentales puedan hacer lo mismo.

 

Ciertamente una teoría monista que fusiona la materia con la conciencia es mas simple que una teoría dualista que postula una sustancia material y una sustancia pensante. Ambas tratan de responder al problema de cómo están compuestas las cosas. Pero, otra vez, no al problema de porque hay cosas en lugar de nada.  

 

Es difícil ver como una teoría final podría explicar el “porque hay algo en lugar de Nada”.

 

¿Porque esto debería  preocuparnos cuando estamos enfrentados a problemas  existenciales mas urgentes que requieren en estos momentos toda nuestra atención? Cierto... pero, a pesar de esta urgencia el misterio de la existencia continua siendo el misterio que aguijonea las mentes curiosas.

 

Nieves y Miro Fuenzalida.